¿Quién Entró a la Casa del Contador? La Justicia Sospecha de un Allegado tras el Macabro Hallazgo en el Freezer

La ciudad de Aguilares se mantiene en vilo tras el macabro homicidio del contador José Antonio Romano , de 52 años, cuyo cuerpo fue hallado oculto en el congelador de su vivienda. La Fiscalía a cargo de Miguel Varela intensificó la búsqueda de dos jóvenes que serían los autores materiales del crimen. La principal línea de investigación apunta a que la víctima conoció a su o sus agresores, calculando en la ausencia de signos de entrada forzada y la certeza de que el atacante poseía las llaves del inmueble.

Las cámaras de seguridad reconstruyeron la noche del crimen, mostrando a Romano subiendo a su camioneta Amarok con un primer sospechoso, para luego ingresar a la casa. Más tarde, el sujeto salió solo, regresó con un cómplice, y ambos huyeron en el vehículo, que fue abandonado luego sin patentes. Este comportamiento tan coordinado y el uso de las llaves indican un nivel de familiaridad y acceso que no se corresponde con un robo al azar.

Un indicio clave para la investigación es el congelador : los peritos confirmaron que fue puesto a la máxima potencia, lo que sugiere que los criminales no solo conocían el artefacto, sino que tenían una clara intención de criogenizar el cuerpo. La víctima era una persona muy reservada sobre su vida privada y un profesional respetado en la Dirección General de Rentas, dificultando a los allegados aportar información sobre posibles conflictos o relaciones que pudieran explicar el violento desenlace.

La Policía concentra la búsqueda en los dos hombres, de entre 18 y 30 años, posiblemente del barrio Villanueva, donde se encontró la camioneta. La teoría principal es que hubo una discusión violenta o un problema que culminó en el asesinato, y luego el primer sospechoso pidió ayuda para deshacerse del cuerpo. ¿Podrá la autopsia finalmente determinar la causa de la muerte y dar a la Justicia el indicio final para dar con los prófugos?