Reforma a la Ley de DNU obtiene dictamen y pasa al recinto de Diputados


La reforma a la Ley de Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) ha superado una instancia decisiva en el Congreso de la Nación: obtuvo dictamen favorable en la comisión bicameral. Este avance permite que el proyecto, que busca modificar el procedimiento de control parlamentario sobre esta herramienta presidencial, quede listo para ser debatido en el recinto de la Cámara de Diputados. El oficialismo logró reunir las firmas necesarias para impulsar la iniciativa, la cual apunta a solucionar una recurrente problemática política y legal en Argentina: el uso constante de los DNU y la consecuente falta de tratamiento legislativo oportuno.
El proyecto de ley introduce cambios significativos que tienen como meta agilizar y transparentar el control que el Poder Legislativo ejerce sobre las decisiones del Ejecutivo. Entre las modificaciones más relevantes se encuentran la imposición de plazos definidos para que la comisión bicameral dictamine sobre cada decreto, así como la obligación de que estos decretos pasen rápidamente al recinto para su tratamiento. Esto busca terminar con el "cajoneo" o el tratamiento indefinido, que en la práctica permite a los DNU seguir vigentes por tiempo indeterminado. También se plantea un mecanismo más claro para la convalidación o el rechazo legislativo, especialmente en temas presupuestarios y administrativos.
De aprobarse esta reforma, se espera que el Poder Ejecutivo vea limitada su discrecionalidad para gobernar por decreto, fortaleciendo la intervención y el rol del Congreso en decisiones de alta sensibilidad política y económica. Los Decretos de Necesidad y Urgencia, previstos en el Artículo 99, Inciso 3 de la Constitución Nacional, son concebidos para situaciones excepcionales, pero han sido utilizados como un mecanismo habitual de gestión. Esta situación ha generado un debate histórico sobre el equilibrio y la división de poderes.
Con el dictamen ya emitido, se anticipa que el debate en Diputados será intenso, ya que diversos sectores de la oposición han manifestado reparos sobre algunos artículos, temiendo que sean excesivamente restrictivos para la necesaria acción rápida del Ejecutivo en momentos de crisis. Una vez superado el debate en la Cámara baja, la iniciativa deberá ser aprobada por el Senado antes de convertirse finalmente en ley. Esta reforma es fundamental para dar mayor previsibilidad al marco legal argentino y reestablecer un equilibrio institucional.